Cuando la carne y la inmadurez se juntan
Hay tres edades espirituales (oro, plata y bronce), pero nuestra carne es hierro dañino, que corta del propósito de Dios.
22 DE DICIEMBRE DE 2024 · 08:00

Las tres edades espirituales (3)
En 1 Juan 2:12-14 (*) descubrimos tres edades espirituales: niños, jóvenes y padres. El niño es cuidado por el Padre, el joven debe aprender a cuidarse a sí mismo, pero el que ha llegado a ser padre ya puede cuidar a otros y dar su vida por ellos, así como un padre lo hace por sus hijos.
(*) Os escribo a vosotros, hijitos, porque vuestros pecados os han sido perdonados por su nombre. Os escribo a vosotros, padres, porque conocéis al que es desde el principio. Os escribo a vosotros, jóvenes, porque habéis vencido al maligno. Os escribo a vosotros, niños, porque habéis conocido al Padre. Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al maligno. (1 Juan 2:12-14)
Recuerda: Bronce, niños. Plata, jóvenes. Oro, maduros
Estamos viendo cómo la Palabra de Dios nos muestra las características de estas tres edades, y también los peligros de quedarnos estancados en una de ellas.
- 1.- MADURAR ES AVANZAR: DEJAR ETAPAS ATRÁS
- 2.- SABER SER NIÑOS
- 3.- ¿QUÉ ES MADURAR EN LA VIDA ESPIRITUAL?
- 4.- HERMANOS, NO SEÁIS NIÑOS...
- 5.- ¿QUÉ ES MADUREZ PARA LAS RELACIONES?
- 6.- LA FIESTA DE CUMPLEAÑOS ARRUINADA
- 7.- ESTE ES UN LLAMADO A LA MADUREZ
Ya vimos los cinco primeros puntos, hoy acabamos esta serie estudiando los dos últimos (6 y 7).
6.- LA FIESTA DE CUMPLEAÑOS ARRUINADA
En la fiesta de cumpleaños de un niño de 5 años, su hermanastro, de 19 (hermano solo de padre, no de madre) en un momento de la fiesta en el que había muchos invitados y los padres del pequeño atendían a unos familiares recién llegados, el hermanastro con sus amigotes del barrio, se llevaron al cumpleaños, repito, de tan solo cinco años. Le dijeron que iban a jugar a la gallinita ciega, y le taparon los ojos. Y, primero, lo cosieron a pescozones; para después dejarlo a oscuras en una habitación de la casa, mientras el resto de los invitados estaba en el patio delantero.
A la hora de soplar las velas, no aparecía el niño, y el pobre padre, que ya era un hombre muy mayor, sufrió un desmayo. A pesar del síncope del hombre, el hermanastro y sus amigotes seguían disfrutando la broma pesada. Por fin, la madre del niño, histérica porque pensaba que le habían secuestrado a su hijo, lo buscó por todas partes y dio con su hijo. Estaba solo, llorando y llamando a gritos a sus padres, en una habitación de la casa.
—¡Ha sido mi hermano! —sollozaba el pequeño—. ¡Ha sido mi hermano! —repetía todavía tomado en brazos de su madre y señalando al hermanastro.
Para colmo, cuando reaniman al padre y éste pregunta que qué había pasado, nadie se atreve a decir nada porque la madre está muy airada discutiendo con la exmujer de su marido, pidiéndole que tome al desalmado de su hijo (con sus amigos incluidos) y se marchen de la casa.
¿Qué crees que hizo el pobre padre? Quien, por cierto, se llamaba Abraham. Le pidió a Agar y a Ismael que se marcharan de la fiesta. Y ya, a la noche, más tranquilos, tuvo que darle la razón a Sara. Ismael era dañino y peligroso en sus bromas hacia Isaac. Lo que había hecho en aquel día tan especial, el quinto cumpleaños o la celebración del destete, no solo era una chiquillada, manifestaba celos, maldad y no medir las consecuencias de sus actos. Debían poner una cierta distancia entre los dos hijos o Isaac correría peligro. O dicho de otro modo, “echa fuera a la esclava y a su hijo, pues no heredará el de la esclava con el de la libre”. Gálatas 4:30.
Diferencia de edad entre Ismael e Isaac: Isaac nace a los 100. Se llevaban 14 años con Ismael (*). En el destete Ismael tenía entre 17 y 19 años e Isaac de 3 a 5 años.
(*) Era Abram de edad de ochenta y seis años, cuando Agar dio a luz a Ismael. Génesis 16.16.
A pesar de la diferencia de edad, según Génesis 21:9 (*), Ismael se burlaba de Isaac. Ese término burlar tiene en hebreo una connotación sumamente negativa. Le hacía daño o lo ultrajaba, se podría traducir (lo demuestro con nota al margen de este artículo).
(*) Y creció el niño, y fue destetado; e hizo Abraham gran banquete el día que fue destetado Isaac. Y vio Sara que el hijo de Agar la egipcia, el cual esta le había dado a luz a Abraham, se burlaba de su hijo Isaac. Genesis 21:9
Agar es un tipo de la carne e Ismael es un tipo de inmadurez.
Ismael representa a la inmadurez en nuestras relaciones, porque se manifestó dañino, malcriado, peligroso, que hizo llorar, que hizo daño.
Debemos sacar nuestra inmadurez porque daña el propósito de Dios. Sara representa el espíritu. Isaac es un tipo de Cristo: lo bello, lo que produce risa (el nombre Isaac significa risa), lo benigno.
Es el Espíritu el que hereda. Es Isaac el que lleva hacia adelante el propósito. Es Isaac el que luego se convirtió en patriarca.
En este sentido de las tres edades, Ismael era ya un hombre jovencito, pero no se manifestó ni como bronce, en el sentido de lo bueno de los niños, ni como plata (un joven que había aprendido al lado de Abraham), se manifestó como hierro. “Quien a hierro mata, a hierro muere”, dice nuestro refrán castellano, que está basado, por cierto, en Mateo 26: 51 y 52: “Guarda la espada, Pedro, que quien a espada mata, a espada muere”.
Nuestra carne es hierro dañino, que nos corta del propósito de Dios
7.- ESTE ES UN LLAMADO A LA MADUREZ
Esta enseñanza es un llamado a pasar de la edad de bronce, niños, a la edad de plata, jóvenes, hasta llegar a la edad de oro, maduros o padres en el señor.
Porque así podremos tener relaciones saludables, pelear las batallas del Señor y asumir la responsabilidad de su obra en la Tierra; entre otras cosas, levantar nuevas generaciones de discípulos a las que les extendamos paternidad.
La palabra burlarse de Génesis 21:9 es el verbo Tsachaq: reír, burlarse, jugar, hacer deporte. Raíz primitiva; reír abiertamente (con alegría o con desprecio); por implicación, divertirse: reír, burlarse, jugar, hacer deporte. En inglés se traduce... No laught, sino mocking (burla).
Tres ejemplos negativos de uso de ese verbo:
Deshonrar, humillar (acusación de mujer de Potifar a José, Génesis 39:14,17), regocijarse con un sentido pecaminoso (la fiesta idólatra de Éxodo 32:6-7). Sansón hacía de juguete (en cuanto a burla y menosprecio, Jueces 16:25).
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Soliloquios - Cuando la carne y la inmadurez se juntan