Una campaña de sanidad con milagros y conversiones impacta Cuba

Se ha hecho viral la información sobre un posible milagro ocurrido a una anciana en la localidad de Auza, Santiago de Cuba, inundando las redes sociales y en especial el WhatsApp, en la isla. Algo que ha llevado a un impacto enorme en una campaña que desarrollaba la Iglesia Metodista Cubana (IMECU), que congregó a 4.000 personas.

Los sucesos, acontecidos en la mañana del 13 de enero, son narrados en un video en el que la hija de la anciana y otros testigos, de los que no se conoce sus nombres, afirman certificar el milagro.

La hija de la anciana testifica que su madre, antes de cerrar sus ojos y caer sin consciencia en la cama de su modesta vivienda de madera en Auza dijo: "Me muero, es el final".

La mujer, en shock, llamó a unos pastores y misioneros metodistas que, cerca de la casa, preparaban una campaña de sanidad y milagros -muy común entre las iglesias evangélicas- en la localidad.

Uno de los misioneros aparece en el video y cuenta a la cámara que para él era evidente que la anciana no estaba con vida, pero que "el Señor nos dijo que siguiéramos clamando".

Para acabar de dar credibilidad a lo ocurrido, también se sumó en un segundo momento un médico, residente de Medicina Interna en el Hospital Provincial de Santiago de Cuba, que certificó el estado de la fallecida. El experto, con larga experiencia recibiendo pacientes críticos de urgencia, a menudo con un final mortal, tomó los signos vitales de la anciana. "Estaba con ausencia de pulso central, frialdad distal y midriasis importante, en dos tercios del iris", explicó en el video el médico. "En otras palabras, estaba fría y no tenía pulso en ningún lugar".

Los cristianos evangélicos que estaban presentes, sin embargo, decidieron seguir orando hasta que unos minutos después la mujer comenzó a moverse, ante lo cual la incorporaron sobre la cama, atestiguó el doctor.

Otra información que también circula profusamente en redes sociales, por parte de un líder evangélico local, señala que el evento de resurrección "alborotó al pueblo", y la policía política cubana presionó para evitar la celebración de la campaña de sanidad y milagros.

Finalmente, en la noche del pasado 13 de enero la campaña se efectuó con una asistencia de cuatro mil personas. Según la información de la Iglesia Metodista de Cuba (IMECU) ocurrieron otros milagros, como ciegos recobrando la vista o personas con necesidad de usar muletas andando sin ellas.

La página de la IMECU en la red social es una de las más visitadas por los cubanos, y allí también refieren que hubo unas 400 conversiones en la noche de Auza, junto a imágenes de una impresionante marea humana.

El Estado cubano teme a la iglesia cristiana general por su poder de convocatoria y, especialmente a las evangélicas por su militancia en la fe, como quedó demostrado en su lucha entre 2018 y 2021 contra la Constitución y el Código de Familia castristas.

Desde el Palacio de la Revolución y grupos socialistas que se dicen independientes se ha desarrollado en lo últimos años, sin éxito, campañas para desprestigiar o aislar del resto de la sociedad civil a las instituciones y comunidad evangélicas. 

Cuba, de acuerdo con el think tank Open Doors, es uno de los 50 países donde más se persigue al cristianismo.