Sonoro fracaso en EEUU de campaña publicitaria con ‘influencer transgénero’

De momento, la “publicidad transgénero” no parece ser rentable en Estados Unidos para las grandes empresas, pese a estar en línea con lo políticamente correcto y de moda.

El importante conglomerado cervecero belga Anheuser-Busch InBev descubrió este hecho tras utilizar la presencia del “influencer transgénero” Dylan Mulvaney en una campaña publicitaria, ya que sus ganancias cayeron drásticamente en el segundo trimestre posterior a la misma.

Desde principios de abril, las ventas de Bud Light se vieron afectadas en medio de reacciones conservadoras denunciando este tipo de publicidad y llamando al boicot. Los datos concretos son que los ingresos de la empresa disminuyeron un once por ciento, lo que llevó a una pérdida de ganancias de casi un treinta por ciento.

En esas mismas semanas, los analistas de la industria informaron que Modelo, vendida en los Estados Unidos por una empresa rival, había reemplazado a Bud Light como la cerveza más vendida en Estados Unidos, y rivales como Coors Light y Miller Light estaban ganando rápidamente en comparación con Bud Light.

Como consecuencia, la gigante cervecera anunció su intención de evitar temas controvertidos en el futuro y concentrarse en atraer a una audiencia amplia. En adelante, la publicidad solo incluirá temas de fútbol y música country.

AB InBev, con sede en Bélgica, es la cervecera más grande del mundo, y presenta las marcas Budweiser, Stella Artois, Corona, Beck's,  Miller Genuine Draft, Peroni y Milwaukee's Best entre otras.

El diario NZZ señaló en un informe reciente al respecto que “quienes se centran demasiado en minorías polarizadoras en la publicidad corren el riesgo de perder a la mayoría”.

Algo similar ocurrió este 2023 con la cadena minorista estadounidense Target, que vio que la venta de artículos del Orgullo en el pasado mes de junio tuvo mala acogida entre sus clientes. En consecuencia Target tomó medidas drásticas y detuvo la venta de dichos artículos.