El río Éufrates, que nace en Turquía y que mide aproximadamente 1,740 millas o 2,780 kilómetros, se está secando.

Y también lo absolutamente cierto es que la Biblia menciona de forma importante este río, tanto en el libro de Génesis como en el Apocalipsis. En el principio y el final de la raza humana.

En Génesis 2:14 dice “Y el nombre del tercer río es Hidekel; este es el que va al oriente de Asiria. Y el cuarto río es el Éufrates”, ubicándolo en el “Jardín del Edén”.

Y en Apocalipsis 16:12 se lee: “El sexto ángel derramó su copa sobre el gran río Éufrates; y el agua de este se secó, para que estuviese preparado el camino a los reyes del oriente”.

Este último texto en Apocalipsis se está cumpliendo sin ninguna duda, lo que ya ha servido de luz de alarma para muchas personas, como señal del fin de los tiempos que se está acercando. Más aún cuando la sequía a nivel mundial, debido al cambio climático, está empezando a verse como una amenaza real para la vida en el planeta.

La letra omega en el Éufrates

Pero algo que añade un componente impactante a todo esto es una fotografía realizada por la NASA, desde las alturas; mostrando que el cauce del río está formando el símbolo de la letra omega.

Precisamente, y tal como hemos visto en los textos bíblicos citados al inicio de esta noticia, el río Éufrates representa el principio (alfa, Génesis) y el final (omega, Apocalipsis). El propio Jesús expresó en cuatro ocasiones en Apocalipsis que Él es el alfa y la omega: Apocalipsis 1:8 y 11 (Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso), Apocalipsis 21:6 y 22:13

¿Una casualidad? Podría ser (o no). Pero la sequía global junto con esta formación del símbolo de la omega en el río Éufrates está alarmando a miles de creyentes... y de no creyentes