El cambio que Dios produce: logos y antilogos

Antes de que Bernabé y Saulo salieran en su primer viaje misionero para transformarse en grandes apóstoles, fundadores de iglesias; primero la iglesia de Antioquía oró por ellos intensamente, con palabra profética y ayunos. Ese es el estilo de Dios: no usas el celular sin cargarlo primero de poder.

Venimos de un año difícil; por lo que es fundamental cargarnos del poder de Dios para este 2021. Clamemos, intercedamos, busquemos la gloria del Señor. Hagamos, por su gracia, un año muy bendecido.

Dios está invitándote a reinventarte. Quiere hacer de tu vida algo nuevo, no lo mismo, algo diferente. Mejor.

¿Y si haces una lista de aquellas cosas en tu vida que deben desaparecer?

Quizá no sepas por dónde empezar, pero Dios se ofrece a realizar esos cambios. Él no se quedará sin creatividad, puedes estar seguro que sabe qué hacer contigo. Confía.

Atrévete. ¿Quién y cómo te gustaría ser?

Y para cambiar, además del poder de Dios, necesitas la Biblia que te habla como Palabra de Dios, como Logos. Y muchos de estos logos son promesas; promesas que parecen no cumplirse en todas las personas, incluso buenas personas. ¿Por qué no se cumplen las promesas de Dios en todos?

Leemos: Porque los hombres ciertamente juran por uno mayor que ellos, y para ellos el fin de toda controversia es el juramento para confirmación. Por lo cual, queriendo Dios mostrar más abundantemente a los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, interpuso juramento (Hebreos 6:16-17).

La palabra traducida como “controversia” es antilogos. La razón por la que algunos no alcanzan las promesas logos es porque fueron expuestos a antilogos, ya sea con sus palabras o creyendo las palabras de alguien más. Cuando esto sucede, es decir, cuando hay un logos y un antilogos, existe una controversia que impide el cumplimiento.

Mucho cuidado con los ladrones de logos que te hacen dudar.

¿Qué hacer?

La respuesta es acudir al juramento de Dios (lee nuevamente el versículo 17). Dios da una palabra en forma de decreto para aquellos herederos que se atienen a su Pacto por la fe, anulando el antilogos y obligando el cumplimiento del logos. Esto sólo sucede a quienes buscan su pacto por encima de cualquier otra palabra (antilogos).

Si tienes promesas por cumplir, ora así: “Padre, envía tu decreto y ponle fin a la controversia. En el Nombre de Jesús, invoco tu juramento y el cumplimiento del Pacto.”

(Supongo que al leer esto, alguno escribirá antilogos; cuida el corazón).