Guatemala renace cada primavera
De los 22 países de la América de habla hispana, Guatemala es el que cuenta con mayor número de evangélicos.
03 DE MARZO DE 2019 · 09:00

El segundo Premio Nobel de Literatura que tuvo América Latina fue el guatemalteco Miguel Ángel Asturias en 1967. Se le adelantó la chilena Gabriela Mistral en 1945, la primera concesión del Nobel a un autor –en este caso autora- hispanoamericano. Asturias es especialmente recordado por su libro “El señor presidente”, de 1946.
En mi último viaje a Guatemala la pasada primavera compré y leí el primer libro que publicó Miguel Ángel Asturias, que tituló “Leyendas de Guatemala” (1930). En este libro el autor presenta a su país como un pueblo abierto, acogedor, trabajador desde tiempos precolombinos hasta nuestros días. Se ha dicho que el extranjero que visita Guatemala por primera vez no puede sustraerse a la tentación de un país que deslumbra a lo largo de la importante cordillera que lo cruza desde México hasta la planicie costera del Pacífico.
No acepto el dicho popular de Guatemala a Guatelpeor. Guatemala no es mala.
Geografía e historia
El país está situado en la América Central. Tiene límites con México, El Salvador, el océano Pacífico y el mar Caribe. Ocupa una extensión de 108.899 kilómetros en los que viven diecinueve millones de personas.
La parte principal de Guatemala fue conquistada en 1524 por el extremeño Pedro de Alvarado, lugarteniente de Hernán Cortés. También participó en las campañas de Cuba, La Española y México.
A principios del siglo XIX Guatemala formaba una Capitanía General que incluía la provincia mexicana de Chiapas. Desde 1808 líderes políticos iniciaron huelgas, protestas y concentraciones al grito de “¡Abajo los chapetones! ¡Viva Guatemala libre!”. La independencia de España tuvo lugar en febrero 1822. Curiosamente esta independencia fue proclamada por el mismo capitán general español: Gabino Gainza.
Tres presidentes evangélicos, dos de ellos nefastos
Guatemala es el único país de la América hispana que ha tenido tres presidentes protestantes: Efraín Ríos Montt y Jorge Antonio Serrano Elías. Los dos fueron hombres nefastos, que deshonraron la fe evangélica y vituperaron el nombre del dulce Jesús de Nazaret.
Ríos Montt subió a la presidencia del país mediante un golpe de estado contra el presidente Romeo Lucas. Nacido en junio de 1926, falleció de un ataque al corazón en un contexto de demencia senil el 1 de abril de 2018. Casualmente en esa fecha yo me encontraba en Guatemala.
Los medios de comunicación, televisión, radio y prensa publicaron artículos de opinión y abundante información sobre la vida y la militancia política del fallecido. Casi todos destacaron sus vinculaciones religiosas. Una época en la que fue atacado por la depresión se refugió en la llamada Iglesia del Verbo Divino, de carácter pentecostal, de la que fue nombrado pastor. Llegó a convertirse en un fanático religioso, llevando al gobierno algunos preceptos de la Biblia. Pero nada aprendió de ella.
La periodista Irmalicia Velázquez dice que cometió el 50 por ciento de los crímenes en años de conflictos armados. El año 2001 se le entabló un proceso judicial acusado de la muerte de 1.711 personas en varias ciudades del país. Ríos Montt nunca llegó a conocer la sentencia definitiva. Murió antes. Según Amnistía Internacional, en los primeros meses de su mandato el ejército bajo sus órdenes mató a diez mil campesinos.
El otro presidente supuestamente protestante, Jorge Antonio Serrano, nunca fue acusado de asesino, pero sí de corrupto y ladrón. Gobernó Guatemala un corto período de tiempo, desde enero 1991 a junio 1993. Destituido por otro golpe de estado huyó a Panamá, llevándose una gran cantidad de millones en dólares, según dicen en Guatemala.
Ahora gobierna el país Jimmy Morales. Era muy conocido como autor y presentador del programa “Moralejas”, un espacio dedicado al humor y a las revistas del corazón. Se presentó como candidato a la presidencia del país en las elecciones de 2015. Ningún político, excepto sus partidarios, creía que vencería. Contra todo pronóstico ganó las elecciones y fue investido presidente de la nación el 14 de enero 2016.
Como Ríos Montt y Serrano, también Morales pasa por protestante. Estudió en el Instituto Evangélico América Latina y fue graduado en Teología en el Seminario Teológico Bautista. Se le conoce como muy amigo de Israel. En realidad, Guatemala ha sido tradicionalmente un país muy valorado por Israel por ser una de las naciones que votaron a favor de la creación del Estado judío en las Naciones Unidas el 29 de noviembre 1947.
En enero 2018 el fundador del Centro del Patrimonio Nacional de Amigos de Sión, Mike Evans, hizo entrega a Morales del premio “Amigos de Sión” en un acto que tuvo lugar en el palacio presidencial de Guatemala. Al mismo asistió el embajador de Israel en el país centro- americano, Mittanya Cohen.
De los 22 países que tiene la América de habla hispana, Guatemala es el que cuenta con mayor número de evangélicos. Estadísticas recientes afirman que en la nación centroamericana hay ocho millones de católicos, siete millones y medio de evangélicos, millón y medio de otras creencias y dos millones que no se identifican con religión alguna.
Mis viajes a Guatemala
He viajado a Guatemala en varias ocasiones. La primera, en noviembre 1998 para llevar una ayuda de diez mil dólares que entregué en un gabinete de Antigua a los miembros de un comité constituido para atender a los damnificados por el huracán Mitch un mes antes.
Regresé a Guatemala en octubre 2009. En esta ocasión estuve en el Quiché, centro del país, capital del departamento de Santa Cruz. Allí tuvo lugar un congreso de jóvenes que reunió a 2.400 chicos y chicas llegados de todos los puntos del país. Los organizadores me pidieron seis conferencias sobre hermandad, amistad, amor, noviazgo, casamiento y desarrollo espiritual.
En abril 2018 regresé al Quiché. En una gran carpa instalada en Santa Cruz, capital de la región, se reunieron unas dos mil personas, todas ellas indígenas. En esta ocasión hablé cinco veces. Pero este viaje no se limitó al Quiché. En la capital impartí cuatro conferencias a 500 líderes cristianos reunidos en congreso. De regreso a España escribí en un artículo: “Vengo con el corazón reventado de ternura, con el alma encendida por fulgores espirituales, con las energías renovadas, ilusionado, feliz”.
Cierro este artículo con una cita del escritor guatemalteco Mario Monteforte, quien ilustró con maestría la naturaleza que embellece Guatemala. Después de describir las regiones donde la lluvia no se prodiga, añade: “pero en nuestro país la fuerza de la vida renace en cada primavera con un himno inmortal que traspasa las nubes y llega hasta el cielo infinito”.
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Países y culturas - Guatemala renace cada primavera