Se ha publicado el resultado de la primera encuesta específicamente dedicada a religión del Centro de Estudios Públicos (CEP), que se define como una fundación privada, sin fines de lucro, de carácter académico y dedicada al estudio de valores y principios.

La encuesta a adultos en Chile (con un margen de error de +/-3) ha recogido el cambio religioso en este país de 18 millones de habitantes en los últimos 20 años. Se constata una gran pérdida de confianza en la Iglesia católica, a raíz de los escándalos de abusos, aunque hay una mayoría de chilenos que cree en Dios.

En todo este tiempo, los evangélicos han aumentado en su porcentaje de fieles pasando de un 12% a un 14%. En cambio, el prestigio de la Iglesia Católica se ha hundido. Los que se declaraban católicos han pasado del 73 al 55%.

La gran crisis para la Iglesia católica se ha dado entre los menores de 35 años: solo un 45% de ellos se declaran católicos. En cambio, los mayores de 55 se declaran católicos al 66%.

Las personas que mostraban fe en Dios pero sin pertenecer a una denominación religiosa concreta tuvieron un aumento significativo desde el punto de vista estadístico, ya que subieron del 7% en 1998 al 11% en 2008 y al 24% este año 2018.

En Chile aún practica la oración (solo un 15% dice que nunca rezan) y que aún cree en Dios. Siete de cada 10 creen en el Cielo y en los "milagros religiosos".

Ateos y agnósticos suman sólo un 7%

Los ateos firmes siguen siendo muy pocos (un 4%) a los que habría que sumar un 3% de agnósticos ("no sé si hay Dios y no creo que haya forma de averiguarlo").

Un 30% de la población se considera "espiritual, interesada en lo sagrado, pero sin religión". Hace dos décadas, los "espirituales no religiosos" eran un 23%.

Si bien solo un 13% declara tener mucha confianza en las organizaciones religiosas, los chilenos tampoco tienen "mucha confianza" en otras entidades: sólo un 12% tiene "mucha confianza" en el comercio y la industria, un 7% en el sistema judicial y un 5% en el Congreso que ellos mismos eligen y votan.