Retos y oportunidades para América Latina, Caribe y mundo hispano

Una reflexión teológica y pastoral plantea una misión centrada en la justicia y la transformación social como inherentes al mensaje del Evangelio.

Redacción ED

08 DE NOVIEMBRE DE 2024 · 08:00

Porapak Apichodi, Pixabay,mano mundo
Porapak Apichodi, Pixabay

El reciente Congreso de Lausana IV, realizado en Seúl, Corea del Sur, del 22 al 28 de septiembre pasados, dejó una profunda huella en quienes participaron de sus discusiones y celebraciones. Con “una mirada crítica y esperanzada”, y conscientes de los desafíos actuales, un grupo de líderes de América Latina, el Caribe y el mundo hispano de los Estados Unidos se reunió después del evento, buscando discernir los caminos a seguir.

Esta reflexión es tanto teológica como pastoral, y plantea una misión centrada en la justicia y la transformación social, inherentes al mensaje del Evangelio.

Impulsado por World Vision América Latina y el Caribe, un grupo de once personas, entre teólogos, misioneros y líderes cristianos, fue convocado para pensar, orar y acordar una serie de acciones en torno a la misión de Dios.

Entre los participantes: Joao Diniz (Brasil-Costa Rica), María Alejandra Andrade (Ecuador), Craig Steward (Sudáfrica), Valdir Steuernagel, Eduardo Nunes (Brasil), Ruth Padilla (Argentina-Costa Rica), Allan Matamoros (España-Costa Rica), Alexia Salvatierra (Estados Unidos), André Pereira (Brasil), Erika Mora (Costa Rica) y Harold Segura (Colombia-Costa Rica), quienes, desde sus diversas realidades nacionales, representan una voz de unidad y compromiso con la Missio Dei (Misión de Dios) en nuestro contexto latinoamericano y caribeño.

La misión, descrita por este grupo, se articula en cuatro ejes de acción clave que buscan una colaboración intencionada y dinámica en favor de una iniciativa evangélica en la región. Estos ejes son: conexión, proclamación, justicia y transformación social, todo esto con el propósito de vivir y demostrar el Evangelio del reino de Dios en un contexto global lleno de complejidades. “No se trata solo de declarar el Evangelio, sino de vivirlo en acciones concretas que apunten a la justicia y al bienestar de nuestras comunidades”, destacó uno de los participantes.

Expresa Segura en varios de sus escritos que, el llamado de Jesús es profundamente humano y desafía las estructuras de poder y exclusión. “Ante la necesidad humana, todas las fronteras, incluidas las políticas, se derrumban; aparece el humano que somos todos”​. Desde esta convicción, la invitación es a seguir reflexionando, aprendiendo y actuando en comunidad, buscando que la teología no se quede en el plano de las ideas, sino que tome cuerpo en cada práctica de justicia y compasión​.

Esta reunión en Seúl y las posteriores reflexiones “marcan el inicio de una nueva etapa en la misión de Lausana, donde las iglesias, organizaciones, seminarios y universidades de América Latina están llamadas a sumarse y a continuar el discernimiento de esta visión, fortaleciendo una red de apoyo y aprendizaje mutuo” expusieron los asistentes.

“Lausana IV apenas comienza, y el reto que deja es claro: responder con fidelidad a la misión de Dios (Missio Dei) , abrazando el evangelio de la paz y la justicia en cada contexto de nuestra región” fue la conclusión final.

Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - LATINOAMÉRICA - Retos y oportunidades para América Latina, Caribe y mundo hispano