Claudio Lomnitz es un reconocido antropólogo que publicó en el 2023 el libro “Para una Teología Política del Crimen Organizado”, una obra que describe como las creencias religiosas pueden ser usadas para justificar prácticas delictivas como el canibalismo.

El autor explica a un medio internacional sobre las implicaciones políticas, sociales y religiosas de los cultos que funcionan dentro los cárteles más famosos de México. “Necesitan crear su propia moral, una moral distinta de la moralidad dominante” comentó Lomnitz, quien a su vez denominó a la moral judeocristiana como “la base del Estado moderno”.

“Esa separación de la moral dominante puede ser muy, muy extrema” -siguió diciendo- “Por eso empecé el libro con el tema del canibalismo, porque la prohibición del sacrificio humano y el canibalismo son las bases de la moral judeocristiana”.

El investigador explica que estas organizaciones crean su propio sistema en todas las esferas para poder funcionar, por ejemplo, usan vestimenta como si tuvieran su propio ejército, recolectan impuestos e incluso algunos grupos se autodenominan como corporaciones.

Ante esta realidad, el escritor le da un sentido al porque estas “sociedades secretas” tampoco omiten crear sus propias prácticas religiosas altamente diferenciadas, “aunque los símbolos que a veces usan, las imágenes que usan, provengan de la sociedad” dijo.

“No hay abominación mayor que esa”

Claudio Lomnitz asevera que estos grupos, como es bien sabido, violan, torturan, matan y secuestran, pero explica que practicar el canibalismo tiene un elemento ritual que toca la base de la moral dominante. “No hay una abominación mayor que esa, no se me ocurre” dijo.

Describió que estas prácticas aparecen con los denominados “narcosatánicos” en Matamoros en 1989. “En ese caso, está todo sujeto a un rito con un santero, un especialista ritual que le da protección mágica a un grupo a través de un rito que incluye el sacrificio humano” relató.

Señala que estos horribles actos se fueron usando posteriormente en algunas organizaciones, pero esta vez, para reclutar a nuevos miembros para el crimen organizado. Dicha cultura del terror fue avanzando hasta llegar al punto de celebrar cuando dominan un territorio, introduciendo carne humana en platillos que sirven en diferentes reuniones.

Los narcocultos

En esta entrevista, el autor explicó que las ideas religiosas de las bandas criminales van cambiando con el paso del tiempo.

Mencionó la idolatría a Nazario Moreno (fundador de los cárteles “La Familia Michoacana” y de “Los Caballeros Templarios”) y a Jesús Malverde (conocido como el patrono de los narcotraficantes); también el culto a la Santa Muerte y lo que denominó “un repertorio medio difuso de cosas que van desde la santería, hasta cultos oficiales de la Iglesia Católica” al utilizar figuras como la de San Judas Tadeo.

Claudio Lomnitz calificó de “muy terrible” esta realidad, sin embargo, aseveró que no pierde las esperanzas en el ser humano, por lo que planteó la necesidad de pensar en este duro tema para tratar de entenderlo y no solo reaccionar ante ello.