El presidente brasileño Jair Bolsonaro y el exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva intercambiaron este domingo acusaciones frente a frente, en el inicio del primer debate televisivo rumbo a las elecciones del próximo 2 de octubre, las más polarizadas en décadas.

Es la primera vez que los dos archirrivales, figuras centrales de la historia reciente de Brasil, se miden cara a cara.

“Su gobierno fue el más corrupto en la historia de Brasil”, lanzó el derechista Bolsonaro, de 67 años, en su primera intervención, dirigida al líder de la izquierda, favorito en las encuestas.

Lula, de 76 años, replicó defendiendo los avances sociales de sus gobiernos y diciendo que el actual presidente “está destruyendo” el país.

Llamado provida

Mediante un comunicado publicado en redes sociales, el liderazgo del Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia manifestó que, “el tiempo se acerca para las elecciones en Brasil que serán las últimas de este año que, por cierto, han sido muy lamentables para la causa provida en nuestro continente”.

La organización provida y familia argumenta que “bajo el liderazgo del presidente Bolsonaro, Brasil ha sido un bastión provida en cuanto a políticas públicas y su influencia en los organismos multilaterales. Sin embargo, ha sido duramente atacado y es sorprendente que la popularidad de Lula da Silva pueda arrebatar hacia la izquierda al gigante latinoamericano”.

“Levantamos nuestras oraciones por Brasil y hacemos votos porque la Providencia sobrenatural del Señor mantenga a Brasil cómo nación provida”, concluye el comunicado del Congreso Iberoamericano.