¿Están los evangélicos con Maduro?

Es vergonzoso a lo que algunos han llegado por unas miserables dádivas del gobierno, como el oprobioso ‘bono el Buen Pastor’ para pastores, o el plato de lentejas llamado ‘Mi iglesia bien equipada’.

24 DE MARZO DE 2023 · 08:00

Nicolás Maduro,Nicolás Maduro
Nicolás Maduro

Mi respetado y apreciado Fílos, agradezco a Dios por esta nueva oportunidad de escribirte, aunque a veces no sean temas tan agradables ni edificantes.

Tienes mucha razón, lo surgido en la infausta reunión entre Maduro y un grupo de ministros y líderes cristianos el pasado 19 de enero pica y se extiende; razón por la cual me ha movido a contestar a tu pregunta, y sé que es la de muchísima gente tanto dentro como fuera de Venezuela, acerca de si los evangélicos están con Maduro.

En primer lugar, déjame aclararte que los reunidos con Maduro y las posteriores reuniones realizadas por su hijo, Nicolás Ernesto, con líderes y organizaciones cristianas, representan un pequeño número de cristianos del país; y a su vez ellos no cuentan con el apoyo mayoritario de su feligresía, quienes guardan un silencio inconforme, puesto que ellos y sus familiares también son víctimas del sueldo de hambre que perciben, así como sufren por el mal estado de las escuelas, hospitales y demás instituciones públicas.

En segundo lugar, apreciado Fílos, la realidad del pueblo evangélico no dista mucho de la del resto de la población venezolana. Me refiero al arrollador rechazo que tiene Maduro y su pésima gestión ante el pueblo venezolano, la cual toca el 90 %; en casi igual proporción está el rechazo de los evangélicos hacia un gobierno que no ha hecho sino atropellarlos, empobrecerlos, robarlos, desmembrar sus familias -recuerda que una vez te dije que la mayoría de los hijos de los pastores se fueron de Venezuela-, y la lista de males es larga.

En tercer lugar, desde que Maduro asumió el gobierno, tras robarse las elecciones hace 10 años, una de las instituciones nacionales que más ha sufrido es precisamente la Iglesia de Cristo. Gracias a Maduro la obra misionera se detuvo, la construcción de templos se paralizó, muchísimos hijos de pastores tuvieron que emigrar porque no alcanzaba el sustento en sus hogares, decenas de emisoras de radio cristianas fueron cerradas injustamente -y hasta el momento la promesa de reabrirlas ha resultado una burla más de Maduro-, al empobrecer los miembros mermaron considerablemente los ingresos de las iglesias y se frenaron o redujeron muchas labores sociales, etc.

A pesar de que los ministros que cerraron fila con Maduro son una reducida representación de la totalidad de la Iglesia del Señor, es vergonzoso a lo que estos han llegado por unas miserables dádivas del gobierno, tanto el oprobioso «bono el Buen Pastor» para pastores, como el plato de lentejas llamado «Mi iglesia bien equipada» que le ofrece a algunas congregaciones míseras ayudas en materiales de construcción, sillas o equipos, parecen más una burla que una ayuda real.

Y lo llamo vergonzoso, hermano Fílos, porque para ello los hicieron llenar un censo donde entregaron la data de su feligresía, pactando tácitamente con Maduro y su hamponil séquito.

¿Cómo se han atrevido a negociar a costa de la ‘novia del Cordero’, la Iglesia que le costó a Jesús su sangre en la cruz? ¿Quién le ha dicho a estos pastores que el pueblo del Señor les pertenece para intercambiarlos por prebendas manchadas por las manos corruptas y narcotraficantes de Nicolás Maduro? ¿Ha dejado el Señor de proveer lo necesario para sostener a su Iglesia para que estas «nubes sin agua» se vendan a este postor comunista?

Imagínate cuánto ha afectado a la obra del Señor en Venezuela este concubinato entre algunos ministros cristianos y Maduro; que ahora su hijo, al que algunos llaman «hermano en Cristo», lo representa en cuanta actividad cristiana masiva se da en cualquier parte del país, desde las grandes ciudades hasta lo pueblitos más apartados; lo cual viene pasando desde el año pasado.

Una de estas actividades masivas que se había mantenido consagrada totalmente al Señor, como lo es la Marcha para Jesús que se celebra masivamente a nivel nacional el 12 de octubre, el pasado año cometieron la torpeza de subir a ‘Nicolasito’ a la tarima y le regalaron una Biblia, lo cual inmediatamente encendió las alarmas a nivel nacional, más cuando hace unas semanas atrás Maduro dio su apoyo público -con finanzas incluidas- a la realización de la Marcha para Jesús de 2023, a través de la misión oficial «Corazón Cristiano». Ni te cuento, amado Fílos, las reacciones de repudio que esto ha originado.

El grave error cometido por la Fundación Marcha para Jesús de Venezuela, que, dicho sea de paso, no es dueña de la Marcha, sino que le pertenece al pueblo del Señor en general, ha sido como una bola de nieve montaña abajo, al extremo de que muchos pastores y líderes han dicho que ni ellos ni sus iglesias participarán si no se da una aclaratoria convincente a lo anunciado por Maduro. Si fuera yo, por vergüenza con los cristianos y por honrar al Señor de la Iglesia, renunciara a la directiva de la Fundación Marcha para Jesús, que es lo menos que pueden hacer para evitar un daño mayor.

Que lo sepan todos estos nuevos mercaderes del evangelio que han engañado a Maduro asegurándole un masivo apoyo, cuando en realidad sus ovejas no los acompañan en sus acuerdos y negociados con el régimen.

Los cristianos venezolanos en su mayoría no votarán por Maduro en las elecciones de 2024, como tampoco votarán por ninguno que postule el chavismo por si este llegare a fallecer debido a la grave enfermedad que padece; ya que los evangélicos no están con Maduro, sino algunos que los pastorean, quienes darán cuenta al Señor por su extravío.

Hay mucho más que decir al respecto, querido Fílos, pero no quiero cansarte con este deprimente asunto. Salúdame a tu amada esposa, a tus hijos y a tu congregación. ¡Maranata!

Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Epístola de Isacar - ¿Están los evangélicos con Maduro?