Esposa de pastor en Chicago es deportada luego de 30 años en EEUU

La mujer, de origen filipino, tiene un largo historial de voluntariado público y participación activa en su comunidad y en su iglesia.

Christian Post · CHICAGO · 07 DE SEPTIEMBRE DE 2019 · 13:30

Edgardo Bartolome atraviesa una depresión por la ausencia de su esposa / WBEZ - Esther Yoon-Ji Kang,Edgardo Bartolome
Edgardo Bartolome atraviesa una depresión por la ausencia de su esposa / WBEZ - Esther Yoon-Ji Kang

La esposa de un pastor de Chicago quien también trabaja como custodio en el Instituto Bíblico Moody fue deportada por haber vencido su visa. Julita Bartolome había vivido en los Estados Unidos por más de tres décadas y era vista en su iglesia como parte integral de la comunidad de inmigrantes.

Bartolome fue arrestada en julio después de presentarse a una reunión con agentes federales de inmigración en Illinois, según informó National Public Radio (NPR).

La esperanza de esa reunión era que ella pudiera postularse para que su relación con su esposo, el ciudadano estadounidense Edgardo Bartolome, fuera reconocida por los funcionarios de inmigración y así pudiera obtener la tarjeta de residencia permanente, conocida como “Green Card”.

En cambio, la mujer pasó más de un mes en el Centro Correccional de Adultos del Condado de McHenry y ahora se encuentra a miles de kilómetros de su familia en su natal Filipinas, pese a esfuerzos fallidos por parte de miembros del Congreso por detener la orden de deportación.

Bartolome fue puesta en un avión y llevada a Manila. Ahora se encuentra fuera del país y su familia en Estados Unidos tratando de solicitar una visa de inmigrante a nombre de ella, según informó la abogada de la familia, Katherine Del Rosario.

“Se trata de una mujer sin antecedentes penales, y una historia muy larga de voluntariado y participación en su iglesia y su comunidad”, dijo Del Rosario, según NPR. “La están enviando de regreso a un país al que no ha llamado hogar en 30 años”.

Bartolome llegó a los Estados Unidos en 1988 cuando vino a trabajar como empleada doméstica. Y hasta el año 2000, vivió en Florida. Según Del Rosario, Bartolomé no sabía cómo navegar por el sistema de inmigración de Estados Unidos. Además, no tenía acceso a un buen abogado debido a problemas financieros.

Julita conoció a Edgardo Bartolome y sus dos hijos después de que su primera esposa muriera de cáncer en 2000. La pareja se casó más tarde y Julita se convirtió en una parte central de su unidad familiar y de la comunidad eclesiástica en la Iglesia Bautista Immanuel en el lado noroeste de Chicago, donde pastoreaba Edgardo.

  Fotos de la familia Bartolomé en su casa / Esther Yoon-Ji Kang
 

Fue en 2002 cuando Bartolome presentó una petición llamada I-130 para que el gobierno reconociera que Julita estaba en una relación familiar con un ciudadano estadounidense, situación que le permitió solicitar estatus legal.

Según Del Rosario, la petición fue aprobada en ese momento. Sin embargo, le dijeron a la familia que tenían que esperar 10 años para que ella solicitara el estatus legal porque tenía una orden de deportación pendiente de cuando vivía en Florida.

“Todo sobre su caso es aprobable, excepto el hecho de que no recibió el consejo correcto de las personas adecuadas en el momento correcto”, dijo Del Rosario a NPR. “Ella hizo su mejor esfuerzo durante los últimos 20 años para obtener un estatus legal en los Estados Unidos”.

Aaron Bartolome, hijo de Edgardo, dijo a NPR que la deportación de Julita está teniendo un impacto negativo en su padre. Él asegura que ella siempre ayudaba a su esposo con todos los aspectos del manejo de la pequeña congregación de inmigrantes.

“Iban juntos para ministrar a las personas, a visitar a personas al hospital, a aconsejar a las personas o a dirigir estudios bíblicos”, agrega Aaron. “Ahora mi padre piensa renunciar porque no puede hacer estas cosas sin ella”.

  Edgardo Bartolome abraza a su hijo, Aaron, mientras esperan afuera de las instalaciones de Inmigración y Control de Aduanas de EEUU / Esther Yoon-Ji Kang - WBEZ

Aaron Bartolome agrega que la ausencia de su madrastra del ministerio es notable ya que ella hacía mucho trabajo para ayudar a las mujeres inmigrantes de la comunidad. También como resultado de la ausencia de Julita, Aaron advierte que su padre se encuentra en una gran lucha emocional y ha perdido peso.

Edgardo Bartolome pudo hablar con su esposa por última vez a través de un video chat el día antes que fuera deportada. Aaron Bartolome dijo durante la llamada que su madrastra había expresado preocupación por el apetito y la salud de su esposo.

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