Por abrumadora mayoría, la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) votó a favor de negarle la comunión a políticos promotores del aborto.

La posición de los obispos apunta al hecho de que la hay un amplio número de políticos (la mayoría demócratas) que alegan ser católicos pero que van contra su doctrina, entre ellos el presidente Joe Biden y Nancy Pelosi, quien preside la Cámara de Representantes. Ahora está por ver cómo se aplica esta decisión de 168 obispos que votaron a favor y 55 en contra de excomulgar a los políticos que defienden el aborto.

“La próxima vez que vaya a la iglesia, les reto a que me nieguen la comunión”, les increpó el congresista Ted Lieu, demócrata proabortista de California, en Twitter.

Llamó a los obispos “hipócritas partidistas” y compartió un tuit de un activista demócrata que dijo que si los obispos “niegan a Biden sus derechos sacramentales” por ser proabortista, la Iglesia católica debería ser despojada de su condición de exención de impuestos.

Además, añadió que se considera católico, pero que promueve no sólo el aborto, sino el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Carta pública desafiando a obispos católicos

En total, 60 congresistas demócratas, todos alegando ser católicos, escribieron una “declaración de principios” pública en la que confrontan a los obispos. Los parlamentarios demostraron desconocer lo que todo católico debe saber: apoyar el aborto es motivo de excomunión en la Iglesia Católica.

Sus firmantes afirman que están “comprometidos” a “proteger a los más pequeños entre nosotros” y “reconocer la dignidad de todos los seres humanos”, excepto de los embriones humanos.

Añaden que creen que actúan aplicando la separación de la Iglesia y el Estado “permite que nuestra fe informe nuestros deberes públicos y sirva mejor a nuestros constituyentes. El Sacramento de la Sagrada Comunión es fundamental para la vida de los católicos practicantes, y el uso de la Eucaristía como arma para los legisladores demócratas por su apoyo al acceso seguro y legal de una mujer al aborto es contradictorio…”

Curiosamente, estos diputados del Partido Demócrata no están separando la Iglesia del Estado sino colocando al Estado con derecho a imponerse sobre la/s iglesia/s, lo cual resulta en un abuso de poder y en una paulatina deificación del Estado que lo permite excederse en su poder.