Biden, que se declara católico a la vez que proabortista y proLGTBI, emitió una proclamación presidencial con motivo del Día Nacional de Oración celebrado este pasado jueves. En ella invitó a "los ciudadanos de nuestra Nación a dar gracias, de acuerdo con su propia fe y conciencia, por nuestras muchas libertades y bendiciones".

El motivo de esta proclama es, como señaló el presidente, que "el Congreso, mediante la Ley Pública 100-37, en su forma enmendada, ha pedido al presidente que emita cada año una proclama designando el primer jueves de mayo como un 'Día Nacional de Oración'".

En todo el texto no hace mención o alusión a la idea de Dios, o referencia alguna a la Biblia. En cambio, Biden si citó a John Lewis (difunto congresista y activista de los derechos civiles) quien describió a los seres humanos como "el vínculo más dinámico con lo divino en este planeta".

Como referencia comparativa, la proclamación más reciente del expresidente Donald Trump del Día Nacional de Oración en 2020 incluyó la palabra "Dios" 11 veces. Y la anterior del expresidente Barack Obama emitida en 2016 incluyó la palabra "Dios" dos veces.

La mencionada proclamación de Trump de 2020 incluyó una referencia a 1 Juan 5:14, con el texto que declara que cuando "pedimos cualquier cosa conforme a Su voluntad, Él nos escucha".

Esta ausencia de Dios y la Biblia en la proclamación del Día Nacional de Oración coincide con ser la primera vez en 70 años que no se celebra dicho evento en el Capitolio de EEUU.

Reacciones críticas

Esta proclamación del presidente Joe Biden en honor al Día Nacional de Oración ha originado muchas críticas de los cristianos conservadores al no incluir en todo el texto la palabra "Dios" ni mención a la Biblia.

"¡La Proclamación del Día Nacional de Oración de Joe Biden ha sido publicada y ni siquiera menciona a Dios una vez!" El corresponsal político jefe de Christian Broadcasting Network, David Brody, comentó en Twitter. “¿Cómo se hace una proclamación sobre la oración y no se menciona a Dios en absoluto? Por supuesto, menciona el cambio climático y la justicia racial. En verdad, esto es patético ... y no es sorprendente ".

El presentador de radio conservador Todd Starnes, autor del libro God Less America , también intervino en la omisión de Biden de la palabra "Dios" en su proclamación. "Con respecto a la impía proclamación del Día Nacional de Oración de Biden: el problema con los demócratas es que no creen que nuestro Creador nos ha otorgado ciertos derechos inalienables", escribió en Twitter. "Creen que estamos dotados por el gobierno".

El texto de la proclamación de Biden

“En este Día Nacional de Oración, nos unimos con propósito y determinación, y volvemos a comprometernos con las libertades fundamentales que ayudaron a definir y guiar a nuestra Nación desde sus primeros días”, dice la proclamación.

“Celebramos nuestra increíble buena suerte de que, como estadounidenses, podemos ejercer nuestras convicciones libremente, sin importar nuestra fe o creencias. Encontremos en nuestras oraciones, sin importar cómo se pronuncien, la determinación de superar la adversidad, superar nuestras diferencias y unirnos como una sola nación para enfrentar este momento de la historia”.

Biden también le dio crédito a la oración por impulsar los "movimientos morales", incluidos los "derechos esenciales contra la injusticia racial, el trabajo infantil y la violación de los derechos de los estadounidenses discapacitados".

Además, el presidente atribuyó la creación de "una nación de notable vitalidad religiosa y diversidad a través de las generaciones" al "derecho de todos los estadounidenses a rezar" garantizado por la Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos.

Al hablar sobre "el papel que el bálsamo curativo de la oración puede desempeñar en nuestras vidas y en la vida de nuestra nación", Biden abordó las "crisis y desafíos de nuestro tiempo". Según Biden, estos desafíos incluyen "una pandemia mortal", "la pérdida de vidas y medios de subsistencia a su paso", "un ajuste de cuentas sobre la justicia racial" y "la amenaza existencial del cambio climático".