Domingo de Pentecostés: congregaciones adoran juntas por primera vez en meses

Cristianos de todo el mundo celebraron ayer el domingo de Pentecostés. Para miles de iglesias en Estados Unidos, fue un día para adorar juntos por primera vez en meses.

Hay una razón muy significativa por la cual eligieron “el cumpleaños de la iglesia” para abrir sus puertas.

En la Iglesia Cristiana Nueva Vida en Virginia Beach, los cristianos se reunieron por primera vez en varios meses.

Siguieron estrictas medidas de seguridad, incluyendo máscaras durante el servicio y sentarse a algunos metros de distancia. Pero esas restricciones no disminuyeron la emoción de estar finalmente juntos de nuevo.

“Oh, se siente tan bien”, dijo Carol Watts, miembro de la iglesia. “Pude llorar sólo por el hecho de poder venir a la iglesia. Es una paz muy grande”.

CBN News le preguntó a la miembro de la iglesia Anna Hubbs qué era lo que más echaba de menos. “La adoración”, respondió. “La adoración aquí es increíble. Es como una explosión del espíritu, nada como eso”.

Tras haber ministrado en línea desde mediados de marzo, el veterano pastor de New Life, Dan Backens estaba feliz de ver a su congregación en carne y hueso.

“Sólo poder tener una habitación con gente adorando a Dios y orando”, dijo Backens. “La energía estaba allí. El Espíritu Santo estaba allí. Predicar a una cámara tiene su propósito y le doy gracias a Dios por ello. Pero no hay nada como predicar al cuerpo local de Cristo. Los conoces. Los amas. Ellos te aman. Fue muy dinámico”.

Backens le dijo a CBN News que no es una coincidencia que reabrieran justo el domingo de Pentecostés.

“Es como el nacimiento de la iglesia en Pentecostés hace 2.000 años y es como el renacimiento de nuestra iglesia local en ese mismo día. Así que eso es más que una coincidencia. Lo vemos como una profunda bendición de Dios”, explicó.

Mientras tanto, al otro lado de la ciudad, en la Catedral del Reino, el obispo Michael Rogers no estaba listo para abrir. Pero eso no impidió que los miembros tuvieran la alabanza de Pentecostés en el estacionamiento de la iglesia.

“Dios dice hoy, la iglesia ha dejado el edificio”, predicó Rogers afuera mientras los miembros escuchaban desde la seguridad de sus autos.

El obispo dijo que un par de cosas influyeron en su decisión de permanecer cerrados.  La congregación es mayor, además del hecho de que perdió muchos amigos pastores en Nueva York por la enfermedad.

“Creo que debemos tener cuidado con las prisas”, dijo. “Las Escrituras dicen que en tu paciencia posees tu alma”. Él tiene la esperanza de que el COVID-19 se vaya tan rápido como llegó.

“Así que realmente creo que cuando el cuerpo de Cristo experimente la verdadera unidad, vamos a tener un movimiento repentino de Dios y creo que al igual que esta pandemia vino, de repente desaparecerá”, dijo Rogers

Aunque las congregaciones eran reducidas y con sus máscaras puestas, muchos estaban agradecidos de estar juntos.

“Ni siquiera pensé en el hecho de que tenía una máscara puesta, estaba tan absorto en el servicio que olvidé la máscara”, dijo Bonita Brown, miembro de New Life. “Fue realmente increíble”.