Muere a los 98 años, Joseph Lowery, líder de derechos civiles

El reverendo Joseph E. Lowery luchó para poner fin a la segregación racial, vivió para ver la elección del primer presidente negro del país y se hizo eco del llamamiento a que “la justicia rodara como las aguas y la rectitud como un poderoso arroyo” en Estados Unidos.

Por más de cuatro décadas tras la muerte de su amigo e icono de los derechos civiles, el reverendo Martin Luther King Jr., el ardiente predicador de Alabama estuvo en la primera línea de batalla por la igualdad, con una entrega inolvidable que rivalizaba con la de King, y que a menudo era más impredecible. Lowery tenía la habilidad de llegar al corazón de la conciencia del país con un comentario impregnado de escrituras, negándose a retroceder si el público era un racista o un presidente de los Estados Unidos.

“Te pedimos que nos ayudes a trabajar para ese día en el que no se le pedirá al negro que se ponga atrás; cuando el marrón pueda quedarse; cuando el amarillo sea aceptado; cuando el rojo pueda avanzar y cuando el blanco abrace lo que es correcto”, oró Lowery en la bendición inaugural del presidente Barack Obama en 2009.

Lowery, de 98 años, murió el viernes en su casa de Atlanta, rodeado de familiares, dijeron en un comunicado. Murió por causas naturales no relacionadas con el brote de coronavirus, según la publicación.

“Esta noche, el gran reverendo Joseph E. Lowery hizo la transición de la tierra a la eternidad” recordó el King Center de Atlanta a Lowery en un tweet del viernes por la noche. “Era un defensor de los derechos civiles, un desafiante de la injusticia, un querido amigo de la familia King.”

Lowery dirigió la Conferencia de Líderes Cristianos del Sur durante dos decenios -restableciendo la estabilidad financiera de la organización y presionando a las empresas para que no comerciaran con el régimen de la época del apartheid en Sudáfrica- antes de jubilarse en 1997.

Considerado el decano de los veteranos de los derechos civiles, vivió para celebrar un hito de noviembre de 2008 que pocos de sus colegas del movimiento pensaron que presenciarían jamás: la elección de un presidente afroamericano.

En una entrevista de 1998, Lowery dijo que era optimista en cuanto a que la verdadera igualdad racial se lograría algún día. “Creo en el triunfo final de la justicia”, dijo. “La Biblia dice que el llanto puede durar una noche, pero la alegría viene en la mañana”.

Miembro de la fraternidad Alpha Phi Alpha, a Lowery le sobreviven sus tres hijas, Yvonne Kennedy, Karen Lowery y Cheryl Lowery.