El falso cristo de Bolsonaro
“Jesús no compró una pistola porque no existían”, dijo Bolsonaro. Y un religioso presente declaró: “Jesús antes de la cruz ordenó: “El que no tiene espada, venda ropa y compre una”.
26 DE JUNIO DE 2022 · 08:00

El pasado 15 de junio el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, sostuvo un encuentro con religiosos en el Palacio del Planalto, donde emitió unas destempladas declaraciones acerca de Jesucristo, tales como: «Jesús no compró una pistola porque no la tenía en ese momento». Uno de los religiosos presente declaró: «Esta es la recomendación del mismo Jesús. Antes de ser crucificado, ordenó: “El que no tiene una espada, venda ropa y compre una espada».
Ante esta absurda y falsa aseveración Bolsonaro respondió que Jesús no tenía un arma de fuego solo porque el objeto no existía en la época en que vivió. Tanto este religioso que de Biblia no sabe nada como el presidente de Brasil están hablando de un falso cristo.
Basta con recordar que la noche cuando Jesús fue arrestado en el huerto de Getsemaní rodeado de sus apóstoles «Simón Pedro, que tenía una espada, la sacó, hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Y el siervo se llamaba Malco. Entonces Jesús dijo a Pedro: —Mete tu espada en la vaina... porque todos los que toman espada, a espada perecerán» (Juan 18:10-11; Mateo 26:52). Significa que Jesús no solo no usaba espada (que es como tener pistola hoy), sino que le prohibía a sus discípulos usarla.
No sabemos a cuál Cristo se refería Bolsonaro -evidentemente es uno falso-, porque el Señor Jesús, el Hijo de Dios, siempre enseñó a poner la otra mejilla, a no tomar venganza, sino a dejar el juicio en las manos de Dios, a orar y perdonar a nuestros enemigos; lo cual tácitamente nos deja ver que Jesucristo siempre ha estado en contra de portar armas y usarlas para defenderse. Parafraseando la enseñanza del Señor en Mateo 26:52, «todos los que toman pistola, a pistola perecerán».
Lo más bochornoso de todo este episodio fue la respuesta que recibió Bolsonaro del expresidente Lula, una persona ideológicamente atea, quien le dijo: «No es posible que una persona que piensa algo así, una persona que dice esas tonterías, diga que es cristiano o que crea en Dios. Puedes estar seguro de que el Dios de tal persona no es tu Dios y no es mi Dios. Porque mi Dios significa amor, humanismo, significa bondad, cariño y respeto por los demás seres humanos».
Expresarse de la manera como lo hizo Jair Bolsonaro en la nación con más cristianos de nuestro continente, como lo es Brasil, hace presagiar que no le irá nada bien en su intención de ser reelecto en las venideras elecciones presidenciales, con comentarios torpes y fuera de lugar como los que emitió, lo que está haciendo es favorecer a su contendor inmediato Lula da Silva, quien usa a Dios demagógicamente por conveniencia al saberse en un país pleno de creyentes en el Señor.
Lo que nunca nos explicaremos quienes estamos de este lado de la barrera es con qué fin Bolsonaro hace referencia a Jesucristo relacionándolo con las armas, algo que es totalmente antagónico, tanto con el mensaje que predicaba como con la naturaleza del reino que representa nuestro Señor.
Es evidente que Bolsonaro está hablando de un falso cristo, uno que porta armamento, porque si es cierto que en los tiempos del Señor no existían pistolas ni ametralladoras, si había armamento, pero Jesús no lo portaba ni tenía necesidad de hacerlo, porque tanto su modo de vida como sus enseñanzas fueron totalmente pacíficas, como bien lo afirmó: «Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios» (Mateo 5:9). Y los pacificadores no portan armas.
Latinoamérica necesita presidentes temerosos de Dios, practicantes de las Sagradas Escrituras si es que queremos salir del atolladero en el que están metidas las naciones que lo conforman, pero esto nunca será posible con líderes que pregonan a un falso cristo, que no solo porta armas, sino que contribuye con el crecimiento y la prosperidad de la industria armamentista mundial.
Definitivamente que Jair Bolsonaro necesita de unos buenos consejos de los pastores que están a su alrededor, porque si sigue con sus torpes declaraciones hará que los votos cristianos con los cuales piensa contar emigren para otro lado o simplemente se abstengan de votar.
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Clarinada venezolana - El falso cristo de Bolsonaro