COMIBAM: la valentía de Urías y el ocio espiritual de David
‘La misma misión para una Iglesia en movimiento’: informe y enseñanzas del V Congreso Iberoamericano de Cooperación Misionera
Evangelical Focus · 21 DE MAYO DE 2025 · 12:00

Un grito que traspasa fronteras
La capital de Panamá acogió, del 22 al 25 de abril de 2025, la 5ª edición del Congreso Iberoamericano de Cooperación Misionera (COMIBAM).
Con el lema Una misma misión para una Iglesia en movimiento, el congreso reunió a unas 1.600 personas de 25 países y a diversas organizaciones cristianas evangélicas.
Entre líderes, teólogos, pastores, misioneros e intercesores, una verdad se destacó: la Gran Comisión, "Id por todo el mundo", sigue siendo un llamado oportuno, urgente y global.
A lo largo de los cuatro días, los participantes no se limitaron a recibir información sobre estadísticas y estrategias. Se enfrentaron profundamente a la realidad espiritual de un mundo en transformación, donde el centro de la fe cristiana se está desplazando hacia el Sur Global, y donde los musulmanes y otros pueblos que antes se consideraban inalcanzables se encuentran cada vez más con Jesús de manera personal.
Hermanos y hermanas de diferentes partes del mundo bendijeron a los participantes con sus testimonios de cómo Jesús continúa edificando Su iglesia, incluso en medio de la persecución y las dificultades.
Zaza Lima, Andrés Duncan, Carlos Madrigal, Afeef Alasah y muchos otros estuvieron presentes, así como docenas de organizaciones misioneras comprometidas con equipar, enviar y capacitar misioneros, incluyendo Crux Institute, Perspectives, Interserve, Pioneers, Frontiers y más.
También tuvieron acceso a un espacio de oración con decenas de referencias a grupos étnicos y pueblos no alcanzados, por los que fuimos invitados a interceder. Hubo innumerables testimonios de cristianos sorprendidos por encuentros con personas de los mismos grupos por los que habían estado orando.
La valentía de Urías y el ocio espiritual de David
Me viene a la mente la imagen de Urías el hitita, fiel hasta la muerte, como símbolo de uno de los peligros más insidiosos de nuestro tiempo: el ocio espiritual. Urías estaba en la primera línea de batalla, a pesar de que no era israelita de nacimiento. David, el rey ungido, se quedó en casa, descansando en su palacio, y fue en ese ocio que cayó.
Esta comparación resonó especialmente en mí al reflexionar sobre los contextos europeos y occidentales, donde la iglesia evangélica se enfrenta no solo a la secularización, sino también a la tentación constante de la complacencia.
¿Cuántos de nosotros hoy vivimos como David, cobijados en iglesias, estructuras seguras como palacios, debatiendo doctrinas, discutiendo posiciones políticas y eclesiásticas, mientras que los verdaderos héroes de la fe, como Urías, están solos en primera línea, en contextos de persecución, migración y pobreza, viviendo fielmente su vocación misionera?
Pueblos no alcanzados: entre puentes y muros
Uno de los temas centrales de COMIBAM 2025 fue el creciente número de musulmanes que se acercan a Cristo. Desde el año 2000, más musulmanes se han convertido al cristianismo que en todos los siglos anteriores juntos. Este fenómeno fue abordado con profundidad y respeto, no con triunfalismo, sino con esperanza.
Más allá de las sesiones plenarias, los participantes tuvieron la oportunidad de elegir entre talleres y grupos de trabajo estratégicos que les ayudaron a comprender mejor el contexto en el que vivimos y a prepararnos para la misión.
Los temas incluyeron la misión policéntrica, el apoyo a los inmigrantes y refugiados, las comunidades indígenas, las diásporas, los deportes y las artes como campos y herramientas de misión, las religiones no cristianas, la urbanización y más.
Esta comprensión histórica, sociológica y teológica es esencial para disolver los malentendidos y construir puentes. En lugar de enfoques apologéticos agresivos, estamos llamados a una actitud de escucha, compasión y encarnación.
Fue profundamente conmovedor escuchar cuántos musulmanes están teniendo sueños y visiones de Jesús. Algunos reconocen Su voz incluso antes de saber quién es Él.
Cuando descubren que las palabras que los consolaron son las enseñanzas del Cristo de los Evangelios, algo cambia. A partir de ese momento, cuando escuchan Sus palabras, sienten que su alma ha encontrado su hogar.
La hospitalidad como clave de la misión
Uno de los conceptos teológicos más recurrentes en el congreso fue la filoxenia, el amor al extranjero. La hospitalidad bíblica no es caridad. Es la reconciliación. Es profético.
Los cristianos del siglo I transformaron el Imperio Romano no con la espada, sino con hospitalidad. Y hoy, el Espíritu Santo parece susurrar una vez más a la Iglesia: "Abre tu mesa. Escucha antes de hablar. Camina a su lado".
Los inmigrantes de religiones no cristianas en Europa no son más accesibles solo porque cruzaron las fronteras nacionales. Siguen existiendo muchos obstáculos. Sin embargo, la auténtica hospitalidad cristiana, sin intención manipuladora, ha sido una puerta a la fe. Una frase resonaba una y otra vez: "El Evangelio llega primero a través de la mesa, luego a través del púlpito".
Esto representa un gran desafío para las iglesias evangélicas en Europa, especialmente en contextos poscoloniales como Portugal o España. Abrir espacio al otro, al diferente, es más que un acto de tolerancia, es un acto de fe.
Cuando abrimos nuestros hogares e iglesias a aquellos que no creen como nosotros, estamos participando en la misión del Dios Trino, que acoge, escucha y se revela a sí mismo en el camino.
Caminando con Dios
Tres cuartas partes del Evangelio de Lucas tienen lugar en el camino. Jesús sana en el camino, enseña en el camino, llama en el camino. La misión no es un evento, sino un estilo de vida en movimiento. Una espiritualidad enraizada en el discipulado, no en la mera pertenencia institucional.
En mi investigación sociológica, he estudiado cómo las iglesias evangélicas ofrecen espacios emergentes de sociabilidad para aquellos que se sienten excluidos por la sociedad acelerada (como describe Hartmut Rosa) y el individualismo moderno.
Este tipo de comunidad es también lo que muchos migrantes no europeos buscan: un lugar de pertenencia, significado y conexión.
El reto que plantea COMIBAM 2025 es claro: la misión es ahora. Y está aquí. Ya no es solo "hasta los confines de la Tierra" sino también en el edificio de al lado, en la escuela de nuestros hijos, en la calle que caminamos todos los días. Si no vamos, perdemos el paso y el ritmo con Dios.
Conclusión: levántate, mira y actúa
Hay un mover de Dios que está ocurriendo en regiones que antes veíamos como "difíciles". El Espíritu Santo no se ve obstaculizado por la geopolítica, las doctrinas o los traumas históricos. Él sigue soplando donde Él quiere.
Depende de nosotros discernir los tiempos, afinar nuestros oídos y levantarnos como Iglesia para caminar con el Dios que se mueve. Que nuestra teología no sea una coartada para la parálisis. Que nuestra ortodoxia no nos impida amar concretamente.
Y que nuestra fidelidad sea como la de Urías, leales hasta el fin, aunque nadie nos vea, aunque nadie nos aplauda. Porque el verdadero reconocimiento viene de Dios, el Señor de la misión.
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Actualidad - COMIBAM: la valentía de Urías y el ocio espiritual de David