La filosofía del huevo
En pocas palabras, en cualquier choque el huevo siempre lleva las de perder.
07 DE JUNIO DE 2020 · 08:00

“OVUM PHILOSOPHIA” Es una expresión latina que se traduce como la “filosofía del huevo”.
Más o menos quiere decir lo siguiente: “Si un huevo se estrella contra la piedra, se rompe el huevo; y si la piedra es la que se estrella contra el huevo, también se rompe el huevo”. En otras palabras, el huevo siempre lleva las de perder.
Esta curiosa frase la utilizan algunas veces para ilustrar la relación patrón – empleado; gobernante – civil; profesor – alumno; religioso – laico; y otras más donde existe una relación de superior o dirigente (simbolizada por la piedra) y una persona o grupo subalterno (simbolizada por el huevo).
Estamos muy acostumbrados y mentalizados a que el “superior” debe ser firme, sólido, inflexible, por lo tanto, el pueblo común, estamos en desventaja, y simplemente debemos cerrar la boca para no salir perdiendo.
Aunque a veces esta actitud nos evita fricciones y “estrellamientos” indeseados, creo que no es la más conveniente.
No siempre es necesario el choque, la agresión, ni las explosiones temperamentales para solucionar una diferencia o conflicto. Siempre abogo por una filosofía pacifista donde se intenten resolver los problemas a través de buenos caminos.
Sin embargo veo que como individuos o como sociedad nos acostumbramos pensar: “mejor me callo nomás” por temor a enfrentar “un piedrazo en la cabeza”. La mayoría de las veces que notamos que algo está mal, es incorrecto, es anti ético, anti constitucional, también la mayoría de nosotros simplemente asumimos las cosas “como son” y tomamos una actitud de conformismo que nos mantiene inertes, estancados, hasta como adormecidos ante tremendos errores, injusticias, y actos de corrupción.
Esto no nos conviene. Simplemente prolonga los errores, las fallas, las anomalías por tiempo indeterminado. Hay un dicho popular que dice “No hay mal que dure cien años”, pero lamentablemente la mayoría de nosotros vivimos solamente 70 a 80 años.
Tampoco quiero decir que hay que ir a atropellar a “huevazos a todas las piedras”. Lo que sí quiero proponer es una mayor interacción entre los líderes y pueblo. Debería crearse primero una mentalidad de que nadie es superior a nadie. Tenemos distintas funciones. Pero cada individuo debe tener la oportunidad de aportar su vida, sus pensamientos, su experiencia, y aún sus disidencias como algo valioso para la comunidad.
Estoy cansado de ver a miles de mis compatriotas que simplemente bajen la cabeza, y no se atrevan a aportar algo para que este país salga adelante.
Estoy harto de ver a personas que se siguen creyendo las “grandes piedras inamovibles” que tienen el derecho de hacer lo que se les da la gana. Rompen a uno, estrellan a otro, doblegan aquí, humillan allá, simplemente para salirse con la suya. Pero este tipo de “victoria” no trae nada bueno para nadie.
Excesos y abusos de autoridad están llevando de mal en peor a nuestra nación toda. Y finalmente todos saldremos perdiendo. Es famosa aquella frase “victoria pírrica” donde el Rey Pirro II obtuvo la “victoria” pero su ejército fue totalmente destruido. (Hay que señalar que Pirro no escuchaba el consejo de nadie, ni el de sus generales).
Es por esto que considero peligroso que sigamos manejándonos en las diferentes áreas, política, iglesia, educación, hogar, etc. con enquilistados y férreos conceptos de “HOVUM PHILOSOPHIA”
Tengamos cuidado que esta filosofía de vida es un “arma de dos filos”.
Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL - Pytheos - La filosofía del huevo