Nigeria | 14 cristianos asesinados tras un servicio de villancicos

Unos 14 cristianos fueron asesinados, entre ellos una niña de un año de edad y una mujer embarazada, hecho ocurrido en el estado de Plateau, Nigeria tras un servicio de villancicos el pasado domingo 29 de diciembre.

El ataque es el último de una serie de atentados contra la tribu Irigwe, en la región centro-norte del país africano. La Iglesia Evangélica Winning All fue la afectada según el grupo de vigilancia de la persecución Internacional Christian Concern.

En la comunidad que rodea la congregación viven unos 1.000 cristianos. El líder local Wuna Gado dijo que había alertado al personal militar en un puesto de control cercano sobre actividades inusuales, pero consideró que sus advertencias fueron desestimadas.

El ataque provocó la pérdida de familias enteras y se realizó un entierro masivo, afirmó la ONG. Entre las víctimas se encontraban Sheba Ernest, de un año de edad, y su madre, Mary Stephen.

El pueblo Irigwe, un grupo predominantemente cristiano, ha enfrentado una adversidad constante, incluida la violencia y el desplazamiento por parte de las milicias fulani, con más de 2.000 creyentes asesinados desde el año 2016.

Entre 2019 y 2023, más de 16.000 cristianos han sido asesinados en Nigeria, según datos recopilados por el Observatorio para la Libertad Religiosa en África.

El grupo documentó 55.910 muertes en 9.970 ataques en toda Nigeria, incluidos civiles y combatientes. De los muertos, 30.880 eran civiles. Las víctimas cristianas ascendieron a 16.769.

Los pastores fulani, musulmanes radicalizados, fueron responsables del 55% de las muertes de cristianos según la prensa internacional.

El reverendo Gideon Para-Mallam, socio y analista del observatorio, dijo en un comunicado: “Las milicias étnicas fulani están atacando a las poblaciones cristianas, mientras que los musulmanes también sufren severamente a manos de ellas”.

Frans Vierhout, analista principal del observatorio, añadió: “Millones de personas se encuentran indefensas. Durante años hemos escuchado cómo los terroristas ignoraban sus llamadas de ayuda mientras atacaban a comunidades vulnerables. Ahora los datos cuentan su propia historia”.

“El gobierno nigeriano debería asumir su responsabilidad de proteger las vidas y las propiedades de los nigerianos. La impunidad ha permitido que los ataques selectivos contra personas inocentes continúen sin cesar”, concluye el informe.