Musulmanes están especialmente abiertos al Evangelio durante el Ramadán

Por segundo año consecutivo, la celebración del Ramadán se ha visto restringida por la pandemia del COVID-19. Sin embargo, los musulmanes tienen más libertad para moverse y celebrar que el año pasado.

Peter, misionero de la organización Cry Out Now, dice: “estamos reconociendo que este es un momento clave para que nosotros, como cuerpo, oremos. Creo que en el islam se está produciendo una sacudida, ya que las mezquitas no están tan abiertas. La gente está un poco más insegura de poder ir a orar con otros. Veo que el cuerpo de Cristo está dando un paso adelante y orando por esto. En cierto sentido, nuestra arma es la oración y la adoración”.

Cry Out Now es un ministerio de oración y ayuno que tiene como propósito ver llegar la transformación en Cristo a los pueblos y ciudades del Líbano, Siria, Jordania e Irak.

Como esta fiesta de un mes de duración es tan importante para el islam, Peter asegura que incluso los musulmanes nominales participan en ella. “Aunque no seas musulmán, no puedes comer en público ni beber ni nada. Hay una sensación de que todo el mundo está involucrado. Creo que la gente es más sensible. Es una época en la que oímos hablar de más sueños y visiones, de más gente que está buscando algo. Hay más oportunidades para que los trabajadores cristianos de la región visiten a sus vecinos musulmanes y a los contactos que han logrado”.

Otra organización misionera, Operación Movilización (OM), está llamando a los cristianos a orar activamente por los musulmanes y a acercarse a ellos para compartir el amor y el mensaje de Jesús. Teniendo en cuenta el mandato de Jesús de amar a Dios y al prójimo y de llegar a todas las naciones, OM asegura que es vital interceder por nuestros vecinos musulmanes ya que el 85% de los 3.000 millones de personas de todo el mundo que tienen un acceso limitado al evangelio siguen las enseñanzas del islam.

Mediante una aplicación llamada Prayer Reach la organización busca guiar a los cristianos a través de 30 días de oración, haciendo un recorrido enfocado en ciudades del mundo musulmán.

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