A la cuarta fue la vencida. Alejandro Giammattei llevaba años buscando la Presidencia de Guatemala pero no fue hasta este domingo, después de una veintena de años persiguiendo un cargo público, cuando ha logrado su trofeo con el afán “de servir”.

Después de una jornada electoral que transcurrió sin incidentes graves, el Tribunal Supremo Electoral dijo que, según los resultados preliminares y teniendo en cuenta que los datos eran “irreversibles”, el aspirante del partido de centroderecha Vamos había logrado la primera magistratura del país.

“No fue fácil pero el objetivo se cumplió. Va a ser un inmenso honor ser el presidente de este país que amo tanto”, afirmó desde un hotel de la capital.

Con el 99,4% de las mesas electorales procesadas, el representante de Vamos obtenía el 57,95% de las boletas, frente al 42,05% de su contendiente, la socialdemócrata Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza, según datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

El médico de 63 años, es un viejo conocido de los electores guatemaltecos tras haber buscado la presidencia hasta en tres ocasiones (bajo las siglas de diferentes partidos) y la alcaldía de Ciudad de Guatemala en otras dos.

En favor de la vida y la familia

Durante la campaña política Giammattei se reunió con pastores evangélicos e indicó que comparte plenamente el respeto a la vida desde su concepción y la defensa de la institución de la familia.

El ahora presidente electo rechazó la ideología de género y manifestó su apoyo a la Ley de Protección a la Vida y la Familia, luego que el Movimiento Evangélico Nacional de Acción Pastoral llamara a los dos candidatos a apoyar una iniciativa de ley. “En mi calidad de candidato presidencial me adhiero a los conceptos vertidos en el comunicado del Movimiento Evangélico Nacional de Acción Pastoral”, indicó Giammattei en campaña.

Apoyo a Israel

También durante la campaña electoral, Giammettei confirmó que si fuera elegido, no solo mantendría la embajada de Guatemala en Jerusalén, sino que también actuaría contra Hezbolá.

Dos semanas antes de la ronda final de votación en las elecciones presidenciales de Guatemala, el entonces candidato enfatizó la relación especial de Guatemala con Israel, declarando: “Quien es enemigo de Israel es enemigo de Guatemala”.

Cuando le preguntaron por la posible reubicación de la embajada, Giammattei dijo: “Con respecto a la embajada en Jerusalén, allí la dejamos, por fe y convicción, y allí se quedará”.