California acordó retirar todos los cargos contra David Daleiden y Sandra Merritt, luego de años de batallas legales por la publicación por parte de los activistas provida de videos con cámara oculta, que mostraban a proveedores de servicios de aborto discutiendo la obtención y venta de partes del cuerpo de bebés abortados.

El Centro para el Progreso Médico, el grupo pro vida supervisado por Daleiden, anunció esta semana que habían llegado a un acuerdo con la Oficina del Fiscal General de California.

Según el acuerdo, los dos activistas presentarán una declaración de “no disputa” en la que no recibirán “ninguna pena de cárcel, ninguna multa, ninguna admisión de irregularidades y ninguna libertad condicional”.

Daleiden dijo que el acuerdo era "una gran victoria para mis investigaciones periodísticas y para el derecho del público a saber la verdad sobre la venta de partes del cuerpo de bebés abortados por parte de Planned Parenthood".

“Ahora todos debemos ponernos a trabajar para proteger a las familias y a los bebés del complejo industrial del aborto”, dijo Daleiden. Ahora puede “concentrarme plenamente en la misión de informar sobre las injusticias de los experimentos financiados por los contribuyentes en bebés abortados y seguir con el periodismo de investigación”.

Mat Staver, fundador y presidente de The Liberty Counsel, que representó a Merritt, emitió un comunicado celebrando el acuerdo negociado.

“Sandra Merritt no hizo nada malo. Hizo lo correcto al exponer la depravación de la industria del aborto. Este acuerdo de culpabilidad pone fin a un caso penal injusto al retirar estos cargos penales infundados sin ninguna pena de prisión, multas u otras sanciones”, afirmó Staver.

“Asesinar bebés humanos para extraer partes de sus cuerpos con fines lucrativos es un acto perverso y no hay excusa para la persecución política de Sandra”.

Una persecución legal

En 2015, CMP publicó una serie de videos encubiertos que mostraban a funcionarios de Planned Parenthood discutiendo la venta ilegal de partes del cuerpo de bebés abortados. Planned Parenthood ha negado repetidamente cualquier irregularidad, alegando que los videos fueron editados engañosamente a pesar de que fueron publicados en su totalidad.

Daleiden y Merritt también grabaron en secreto conversaciones que tuvieron lugar en conferencias organizadas por la Federación Nacional del Aborto en 2014 y 2015, y la NAF los demandó en respuesta.

En uno de los videos encubiertos filmados en un taller de Planned Parenthood en Michigan en 2014, una proveedora de abortos argumentó en contra de ayudar a las víctimas jóvenes de violación y agresión sexual. Afirmó que, como los trabajadores de la clínica no son empleados estatales, no deberían estar obligados a denunciar los casos sospechosos de abuso infantil a las autoridades.

Los videos generaron una condena generalizada y dieron lugar a un renovado impulso para que el gobierno federal retire la financiación a Planned Parenthood y a múltiples investigaciones sobre si el principal proveedor de abortos del país estaba violando la ley federal.

También dieron lugar a años de litigios contra Daleiden y Merritt, que se enfrentaban a varios cargos, incluidas grabaciones ilegales de eventos privados y falsificación de identificaciones como parte de su cobertura.

En octubre de 2022, por ejemplo, un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el Noveno Circuito emitió una decisión unánime  contra los activistas pro vida que les exigía pagar una sentencia de 2,4 millones de dólares a Planned Parenthood.

En mayo de 2020, Daleiden presentó una denuncia contra la entonces senadora estadounidense Kamala Harris, demócrata de California, y otros, alegando que Harris lo investigó injustamente mientras ella era fiscal general de California.

“Daleiden se convirtió en el primer periodista en ser procesado penalmente bajo la ley de grabación de California… porque su investigación reveló y publicó contenido ‘impactante’ que el Fiscal General de California y los conspiradores privados querían encubrir”, afirma la demanda.