Miles de personas acudieron el pasado fin de semana a la 52 edición de la Marcha Nacional por la vida en Washington para luchar por los derechos humanos desde la concepción, un evento que contó con la intervención en video del presidente Donald Trump y la presencia del vicepresidente J.D. Vance.

El principal mandatario estadounidense elogió a los defensores de la vida por su compromiso con la protección de los no nacidos y enfatizó que la sociedad debe “defender a los pequeños bebés que no pueden defenderse por sí mismos”.

“Sé que sus corazones están cálidos y sus espíritus son fuertes porque su misión es justa, muy, muy pura: forjar una sociedad que acoja y proteja a cada niño como un hermoso regalo de la mano de nuestro Creador”, dijo.

Trump reiteró su compromiso de promulgar políticas que apoyen a las madres, incluidas las medidas para desfinanciar a las organizaciones que realizan abortos y promover la adopción como una alternativa viable.

El día anterior a la marcha, el presidente de la nación norteamericana había firmado el indulto para 23 activistas provida procesados en el gobierno anterior. “No deberián haber sido procesados. Muchos de ellos son personas mayores... Es un gran honor firmar esto”. comentó luego de tomar la medida.

Donald Trump y J.D. Vance en sus intervenciones. 

“Es una bendición luchar por los no nacidos”

Por su parte, el vicepresidente J.D. Vance, comentó en el evento: “No creo haber visto nunca una multitud tan alegre... cada niño es un milagro y un regalo de Dios”.

Vance, recalcó que durante esta administración se harán esfuerzos para crear una sociedad profamilia; mencionó la propuesta de aumentar el crédito fiscal por hijo y el apoyo a la Ley de Sobrevivientes del Aborto Nacidos Vivos, que requería que los médicos brinden atención médica vital a los bebés que nacen después de un intento fallido de aborto.

"La Marcha por la Vida no es un evento aislado que se lleva a cabo en un gélido día de enero. La Marcha por la Vida es el trabajo diario del movimiento provida", afirmó.

También agregó: "No avancemos con frustración, sino con alegría. Estamos felices de marchar por la vida. Estamos felices de saber que esa imagen en la ecografía es la imagen de un bebé con esperanzas, sueños y potencial para llegar a ser un bebé. Es una alegría y una bendición luchar por los no nacidos, trabajar por los no nacidos y marchar por la vida".

Este evento se lleva a cabo anualmente desde la decisión Roe v. Wade de 1973 y atrae a miles de personas a la capital del país para defender los derechos de los no nacidos. Este año fue particularmente significativo, ya que marcó la segunda marcha desde la decisión de la Corte Suprema de revocar Roe v. Wade en 2024.