En Estados Unidos hay hoy en día más evangélicos visitando las iglesias con regularidad que antes de la pandemia, según una investigación que analiza los hábitos de asistencia a la iglesia de los creyentes después de la crisis sanitaria.

La encuesta consultó a 819 protestantes o evangélicos que asistieron presencialmente a servicios religiosos y fue encargada por Infinity Concepts, una agencia de comunicaciones de marca, en asociación con la firma consultora de investigación Gray Matter Research.

En total, alrededor del 54% de los evangélicos asisten a servicios presenciales cada semana y el 65% al ​​menos una vez al mes. Las cifras también muestran que el 39% atiende los servicios on line una vez a la semana y el 15% hace lo mismo entre una y tres veces al mes.

"Estudios de investigación como estos son esenciales para comprender los cambios y tendencias de la Iglesia estadounidense", dijo Mark Dreistadt, presidente y director ejecutivo de Infinity Concepts. “La primera participación on line se ha triplicado desde antes de la pandemia, sin embargo, tres de cada cuatro evangélicos están encontrando una iglesia al asistir a un servicio de manera presencial”.

Más resultados del estudio

Alrededor del 15% de los evangélicos visitaron una nueva iglesia por internet antes de asistir en persona, un marcado aumento en comparación con el 5% antes de la pandemia, según los datos.

Sin embargo, el estudio también mostró que la mayoría de los evangélicos menores de 35 años encontraron su iglesia asistiendo personalmente a una reunión de adoración (78%). Sólo el 4% de los adultos más jóvenes revelaron que su primera experiencia en su iglesia fue a través de un servicio on line.

Por otra parte varios estudios de investigación han demostrado que la mayoría de los que abandonaron la iglesia durante la pandemia y no han regresado “eran feligreses poco comprometidos”, dijo Ron Sellers, presidente de Gray Matter Research.

La invitación personal sigue siendo el canal principal para quienes visitan la iglesia por primera vez. La cifra de quienes asisten a la iglesia después de haber sido invitados por un familiar o amigo es muy similar: 59% antes de la pandemia y 57% después de la crisis sanitaria.

Aunque si dividimos por franjas de edad hay marcadas diferencias en los extremos. Un 71% de los evangélicos menores de 35 años asistieron a su iglesia actual por una invitación personal, en comparación con sólo el 51% de los evangélicos mayores de 55 años. Una diferencia que se reduce en edades intermedias: el 62% en el grupo de edad de 35 a 44 años, y el 59% para creyentes entre 45 y 54 años.